El saber nos lleva a seguir con la corriente de fuerza vital que nos facilita cumplir con nuestro destino, misión o "leyenda personal", como así lo llama Paulo Coelho. Nos disponemos desde ahora a rendir la mas esmerada de las atenciones, a aquellas figuras que han logrado dejar una gran huella en la pantalla de honor de nuestras devociones más sentidas y queridas. Grandes personajes que nos han dejado un legado de luz y orientación para aprender la integridad de ser un verdadero y completo ser consciente.
EL NIÑO ANGEL
¡Cómo discuten y cómo gritan! ¡Cómo dudan y se desesperan! ¡Nunca se acaba su pelear!
Que tu vida se ponga entre ellos, inalterable y pura como una lengua de luz, hijo mío, y les imponga silencio con su hermosura.
¡Qué crueles los hace la codicia y la envidia! Como ocultos cuchillos sedientos de sangre son sus palabras.
Ponte tu entre sus corazones airados, hijo mío, y que tus ojos buenos caigan sobre ellos como cae la indulgente paz del anochecer sobre la contienda del día.
Déjales que miren tu cara, hijo mío, y que así comprendan el sentido de todas las cosas. Que te amen, y así se amen unos a otros.
Ven tú a ocupar tu sitio al seno de lo eterno, hijo mío. abre y levanta tu corazón al salir el sol, como una flor nueva. Y cuando el sol se ponga, inclina tu frente y acaba en silencio la oración de la tarde.
Autor: Rabindranath Tagore
Tú, esencia, eres conciencia: mi conciencia
y la de otros, la de todos,
con forma suma de conciencia:
que la esencia es lo sumo
es la forma suprema conseguible,
y tu esencia está en mí, como en mi forma.